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Criterios de salud psicológica en la Teoría de la Praxis

En la teoría de la praxis tener salud psicológica es diferente de “ser normal”. Porque no se trata simplemente de comportarse de acuerdo a las normas. La norma psicológica, lo que prevalece socialmente, es la neurosis en diversos grados; las personas más sanas psicológicamente son minoría.

En términos médicos lo normal es que la persona se considere sana cuando no tiene molestias corporales o evidencias de molestias potenciales. Eso es lo normal, la norma, lo habitual. Sin embargo, en el ámbito psicológico, desde hace muchos años, es que las personas consideren como normal el sufrimiento cotidiano, los conflictos interpersonales e incluso la violencia. En el campo jurídico se considera como culpable a una persona que comete una acción violenta sin tener alterada su capacidad esencial de raciocinio, sin considerar que casi todas las acciones violentas implican necesariamente algún tipo de alteración emocional, a la que generalmente no se le considere “anormal”, puesto que es algo a lo que muchos siglos nos han habituado.

La Teoría de la Praxis propone un nuevo concepto de salud psicológica1) que no sea –como en la medicina- la ausencia de una “enfermedad” manifiesta, sino a la inversa: concebir a la enfermedad como la ausencia, disminución o carencia de salud. No queremos tampoco plantear la salud de manera idealizada, suponiendo un estado muy elevado de la misma, sino solamente plantear los criterios mínimos que se requieren para considerar que alguien tiene una salud psicológica esencial.

De acuerdo a la Teoría de la Praxis una persona se considera sana cuando en su vida prevalece el estado de ecuanimidad, es decir, la tranquila satisfacción con lo que se está viviendo. Para que esto sea posible, es necesario que una persona se sienta:

  1. Libre y autónoma. Es decir, sin obstrucciones absurdas externas o internas y, por tanto, apegando su actuación a su propia voluntad y a sus propias normas.
  2. Tomando las riendas de su vida. Es decir, teniendo metas, objetivos o propósitos generales de mediano y/o largo plazo hacia los que dirige sus acciones.
  3. Manteniendo un grado básico de satisfacción con lo que ha vivido hasta la fecha. Al hacer un balance de lo que se ha vivido resulta favorable a los valores que la propia persona tiene como referencia. En este balance, las etapas más recientes tendrán un mayor peso psicológico que las etapas remotas, de tal manera que las vivencias satisfactorias de los últimos meses y años compensarán de manera significativa las posibles vivencias insatisfactorias de años lejanos.

Estos tres criterios generales dependen de qué tanto en la vida de una persona estén ocurriendo una serie de vivencias concretas que promueven y mantienen, o son causa de, la salud psicológica. Cuando esas vivencias no ocurren o disminuyen significativamente se generan estados neuróticos y, en casos extremos, psicóticos contrapuestos a la salud psicológica antes enunciada.

A continuación señalamos los criterios mínimos de salud psicológica que debieran alcanzarse en la vida de todas las personas. El hecho de que actualmente la mayoría de las personas no cuenten con estas condiciones psicológicas hace notar la enfermedad psicológica que prevalece en la sociedad actual, lo que explica buena parte de la paradójica decadencia social en un mundo cada vez más tecnologizado.

En efecto, puede decirse que una persona tiene salud psicológica cuando cumple cada uno de los 23 criterios siguientes:

  1. Tiene un nivel alto de autoestima o autovaloración, sin caer en el extremo de la egolatría (adoración fanática a sí mismo) que –como dice Fromm– representa una compensación a una baja autoestima esencial.
  2. Forma parte de un grupo (de al menos dos miembros) cohesionado por fuertes sentimientos de amor y, además, mantiene vínculos amistosos importantes con al menos otras 2 personas.
  3. Cuenta con proyectos a realizar en el corto, mediano y largo plazo.
  4. Está llevando a cabo por iniciativa propia actividades cotidianas dirigidas hacia sus aspiraciones personales: Realiza evaluaciones periódicas de sus avances (por lo menos dos veces al año) y procura aprender de las experiencias anteriores.
  5. Comparte con alguien sus ideas y proyectos.
  6. Siente confianza y comparte la mayor parte de sus sentimientos o pensamientos íntimos con al menos otra persona, en forma estable.
  7. Mantiene actividades frecuentes de convivencia placentera (por lo menos dos veces a la semana) con una o más personas cercanas afectivamente.
  8. Tiene flexibilidad para adaptarse a circunstancias imprevistas o novedosas.
  9. Tolera los fracasos y fallas propios y de los demás, buscando nuevas alternativas racionales y realistas para salir de ellos.
  10. Reconoce sinceramente las virtudes, cualidades y éxitos de los demás, tanto como los propios
  11. Expresa directamente y en forma cordial sus opiniones y sentimientos, sean compartidos o no por otros.
  12. Respeta las opiniones, acciones y sentimientos de los demás que no le afecten negativamente en forma directa.
  13. Sólo tiene temor ante los peligros reales y usualmente toma las prevenciones más adecuadas para evitar riesgos
  14. Tiene facilidad para establecer relaciones interpersonales y comunicarse de una manera cordial y directa.
  15. Mantiene buen humor la mayor parte del tiempo; ríe y sonríe compartiendo con los demás en forma desinhibida, sin ser grotesco
  16. Es generoso con los demás, pero defiende sus principios y sus derechos personales. Evita la obtención de beneficios personales a través de perjudicar a otros.
  17. Toma decisiones libremente y asume con responsabilidad las consecuencias.
  18. Prefiere las soluciones pacíficas y la conciliación justa de intereses; rechaza activamente la violencia verbal o física, salvo en casos ineludibles.
  19. Mantiene coherencia y congruencia (al menos en un 80%) entre lo que siente, lo que piensa, lo que dice y lo que hace.
  20. Tiene sueños agradables o no recuerda que sueña.
  21. Cuida el estado físico y la imagen de su cuerpo mediante hábitos higiénicos, de alimentación, ejercicio y acicalamiento, así como atiende con diligencia sus malestares o alteraciones físicas.
  22. Lleva a cabo acciones que representan amor sincero por su patria, por la humanidad y por la naturaleza.
  23. Recurre al apoyo de personas capacitadas, de manera preventiva o necesaria, para elevar su calidad de vida personal y colectiva.

Cada uno de los factores está correlacionado integralmente con los demás, de tal manera que el avance en uno de los rasgos conlleva necesariamente adelantos en otros aspectos, y viceversa.

En términos estimativos basados en diversas investigaciones parciales y análisis psicosociales considerando los niveles socioeconómicos, las características culturales y la situación social de México, y quizá del mundo con algunas variaciones, calculamos que más de un 75% de la población padece de niveles muy bajos de salud psicológica, es decir, tienen elevadas neurosis y psicosis. Alrededor de un 20% de la población tiene una situación regular de neurosis que no les permite sentirse contentos con la vida y solamente un 5% tiene una situación de neurosis baja que les hace sentirse más o menos bien con la vida que llevan. Debido al impacto de la vida social sobre cada persona, nadie está exento de neurosis, es decir, nadie cumple al 100% con estos criterios mínimos que se requieren para lograr la salud psicológica esencial. Por eso, como también decía Freud, existe una sensación de “malestar en la cultura”.

Sin embargo, estos criterios de salud psicológica permiten orientar la vida personal y colectiva hacia ella. Por ello, son fundamentales para dirigir la psicoterapia, así como también tienen relevancia para el diseño de procesos educativos, particularmente en la educación básica.

1)
No solamente “salud mental”, porque mente solamente se refiere a aquello que sucede de manera interna o privada en el individuo; mientras que “salud psicológica” abarca el campo integral de una vida humana, como un todo, incluyendo las relaciones con el entorno físico y el sistema y la dinámica de las relaciones sociales en que una persona participa. Así que los criterios de salud psicológica pretenden abarcar la salud de ese todo integral.
criterios_de_salud_psicologica_en_la_teoria_de_la_praxis.txt · Última modificación: 2022/11/16 21:50 (editor externo)